MIS CREENCIAS ALTERNATIVAS A LOS VARIOS MANDAMIENTOS RELIGIOSOS…

Sobrevivir a los silencios vacíos.

Ser a pesar de los gritos  que te dicen que no eres nadie.

Crecer ignorando los halagos que te esclavizan, sabiéndote acompañado sólo por tus propios pasos.

Decidir en un mundo de indecisos y tener el valor de equivocarte aun cuando esos indecisos dicen que nunca te has de equivocar.

Hablar aunque te digan que te toca callar, guardar silencio cuando te dicen que ahora sí, toca hablar…

Caminar, caminar, caminar y parar lo justo, y tan sólo para poder prestar tu atención a quién te necesite, pero no mucho más, aunque los fastuosos neones que te vas encontrando en el camino te atraigan hacia ellos y pretendan retenerte.

Ignorar las cegadoras luces de la ciudad que quieren anclarte para que olvides el camino.

Llegar más allá y destruir los “non plus ultra”.

Acabar con los mitos y creer más en la utopía.

Devorar el tiempo para que éste no te devore.

Querer uno a uno para así descubrir a la persona y olvidar al grupo que anula a ese uno.

Recordar que si todos somos uno, uno también lo es todo.

Perdonarte cada día como forma de descargar tus lastres y poder aligerar el camino.

Aceptar todo sin esperar a cambio que necesariamente te tengan que aceptar a ti.

 Aliarte con el lobo que llevas dentro sin reprimir los instintos, sólo así se disipa la fina línea entre el bien y el mal. 

Ver más que mirar, escuchar más que oír, sentir más que soñar.

Tomar cuanto se pueda para después soltarlo  sin miedo a perder.

 Nada de cuanto hay en el camino nos pertenece, pero nada nos es ajeno, todo cuanto vemos aquí y ahora ya estuvo ayer, y otros caminantes lo tomaron para después dejarlo en otro punto del camino.

Sólo somos un cúmulo de almas inquietas que navegan sin rumbo fijo, acompañándose de otras soledades. Nuestro único compañero fiel es la firme voluntad de Ser, y no hay un Dios omnipotente y omnipresente alumbrando nuestra senda.

Somos cada uno de nosotros quienes labramos nuestros propios destinos y formamos parte del Todo, lo somos todo y no somos nada, por lo tanto somos Dios en esencia.

Lo que hoy es todo para nosotros mañana quizás ya no sea nada, y de esa nada volverá a nacer el todo. En el ciclo universal no existe diferencias entre la vida y la muerte.

Ser firme en las creencias, pero sólo si estas no te impiden proseguir el camino.

Dudar, dudar, dudar y dudar de cuanto ves y de cuanto crees, pues sólo en la duda serás capaz de preguntarte y no dar por acabado un viaje que de por si es infinito…

Cómo no creo en los mandamientos limitadores a estas frases le seguirían cientos de miles, pero todas quedan encerradas en sentir y hacer cuanto instintivamente nos impulsa hacia delante.

A todos esos faros nocturnos o diurnos que en sus trabajos solitarios o en la soledad de sus casas construyen sus propios caminos día tras día sin publicitarse ni ser publicitados. Es así como construimos un camino común, piedra a piedra. Eso los poderosos no lo saben y jamás lo sabrán, ellos en sus grandes decisiones que intentan devorarnos se creen que son pero jamás podrán SER. GRACIAS por pararos conmigo en esos puntos neurálgicos de nuestro largo camino. Hasta pronto camaradas…

Gracias también a ti, señorita Brightman, tú voz, más allá de lo que digas, tiene esa profundidad que me da seguridad, me siento muy vivo cuando te escucho.

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